

La guerra ruso-ucraniana ha impactado los precios de los combustibles a nivel global. Hemos visto en México el incremento en los precios a pesar de los subsidios implementados por el gobierno mexicano. A pesar de que se intenta incrementar la producción por el mundo del occidente, es importante analizar la reacción del país ruso en cuando a la colocación de los productos petrolíferos.
Europa ha sido uno de los principales clientes consumidores de petrolíferos rusos; sin embargo, a partir de la guerra los países europeos y estadounidenses aplicaron sanciones para dejar de comprar combustible ruso. Esto ocasionó que los precios del combustible se incrementaran de manera histórica en países del occidente, perjudicando la economía impactando en la inflación. Mientras tanto Rusia comenzó a hacer acuerdos comerciales petroleros con las economías más grandes del mundo: China y la India.
China es una potencia comercial ya que su nivel de consumo en cualquier índole es de gran impacto y esto incluye el consumo de energéticos. Por esta razón, Rusia le ofrece sus petrolíferos a China. China está en una posición difícil ya que de cierta forma se ve apoyando a Rusia, pero no puede declararse enemigo de los Estados Unidos -a pesar de la guerra comercial que inició Trump- debido a la demanda comercial que representa ese país.
Rusia volteó a ver a la India como otro socio comercial estratégico siendo un país de alto consumo en petrolíferos. Por lo que las sanciones implementadas por países de occidente les perjudicaron más a ellos que a la misma Rusia en materia económica energética.
En México no podremos seguir subsidiando el precio de los combustibles a largo plazo. Inclusive en Nuevo León estamos resintiendo el incremento en los precios en las gasolineras. Las decisiones internacionales en materia energética nos van a afectar directamente por lo que debemos estar preparados y seguir monitoreando como reaccionan los países más poderosos del mundo.
Source Lissely Ancira: ¿Quién comprará el combustible ruso?