


La histórica misión Ax-1, la primera completamente privada en llegar a la Estación Espacial Internacional (EEI), se despidió este martes de los astronautas que la acompañaron durante más de una semana y alista su regreso a la Tierra, para el que no hay fecha definida hasta que no mejoren las “condiciones climáticas”.
En un mensaje en su cuenta de Twitter, la compañía a cargo de esta misión, Axiom Space, informó que la separación de la cápsula Dragon de SpaceX de un módulo de la EEI, prevista para la noche de este martes, se cancelaba hasta nuevo aviso “debido a condiciones climáticas desfavorables” en el área prevista de llegada, frente a la costa de Florida.
La firma agregó que junto a la NASA y SpaceX se hallan “evaluando la próxima mejor oportunidad para el regreso de Ax-1″ y de sus cuatro tripulantes.
De haber iniciado el desacoplamiento sobre las 10 de la noche de hoy, hora del este estadounidense (02.00 GMT del miércoles), la tripulación de esta misión, encabezada por el hispano-estadounidense Michael López-Alegría, hubiera alcanzado las aguas del Atlántico a las 3.24 de la tarde del miércoles (19.24 GMT).
Además de López-Alegría, la Ax-1 está compuesta también por el estadounidense Larry Connor, el canadiense Mark Pathy y el israelí Eytan Stibbe, tres ricos empresarios que, de acuerdo a medios estadounidenses, cada uno pagó 55 millones de dólares para ser parte de esta misión.
Todos ellos fueron homenajeados hoy en una ceremonia transmitida por la NASA, en la que el comandante Tom Marshburn de esta agencia espacial y los otros seis ingenieros de vuelo que conforman la Expedición 67 de la EEI agradecieron la estadía de los cuatro astronautas de la Ax-1.
Además de Marshburn y Kayla Barron, la EEI alberga en estos momentos a Raja Chari, también de la NASA; al astronauta Matthias Maurer, de la Agencia Espacial Europea (ESA), y los cosmonautas Oleg Artemyev, Sergey Korsokov y Denis Matveev, de la agencia espacial rusa Roscosmos.