Los ocho barrios de Iztapalapa se preparan para la representación del viacrucis número 179, una tradición que organizan los habitantes de la alcaldía desde hace más de siglo y medio.
El arribo del COVID-19 en 2020 provocó que la escenificación se viera minada para los fieles de esta demarcación, luego de que autoridades capitalinas decidieran celebrar la Pasión de Cristo a puerta cerrada en la iglesia del Señor de La Cuevita.
Para este año, los bajos contagios por coronavirus registrados en las últimas semanas permitieron que este evento tuviera un formato híbrido.